Reflexiones del editor: Recordando El Día de la Raza
9 octubre, 2020
«Es fiesta fundamentalmente de Hispanidad, la de la Raza, porque consagra el predominio, la supremacía –o digámoslo más a tono con la naturaleza de los hechos–, el imperio de espíritu hispano con toda su raigambre ancestral, transportado a las regiones ignotas por unos hombres que sólo se amparaban con la Cruz de nuestra religión y con la espada de nuestros católicos Reyes». ABC, 12 de octubre de 1937
El 12 de octubre es la Fiesta Nacional de España. Se recuerda así la llegada de Colón a América en 1492 y el inicio del llamado «descubrimiento», que consolidó a España como potencia colonial. Esta celebración, que en América se vive actualmente de una manera bien diferente, se empezó a celebrar a principios del siglo XX como el «Día de la Raza Española» y se convierte en un icono del fascismo español durante la dictadura de Francisco Franco, hasta que en los años sesenta se convierte ya en el Día de la Hispanidad. Con esta celebración se pretendía destacar el carácter «diferencial» de los españoles, que no solo habían supuestamente traído la civilización y la religión a los pueblos originarios de América, sino que los habían mejorado con su aporte genético expandiendo su presencia por el mundo. Estos hechos históricos, más toda el discurso sobre la «cruzada contra el moro infiel», cuya expulsión del territorio peninsular culmina también en aquella lejana época, se convierten en los referentes históricos de los que bebe ideológicamente el fascismo español que sueña con este pasado «glorioso» y el futuro de un resurgir nacional.
En ¿Qué es en realidad el fascismo?, de los suecos Kalle Johansson y Lena Berggren, el formato cómic sirve para exponer de una manera sencilla cuáles fueron las ideas claves del fascismo, que lo hicieron tan atractivo para muchas personas en todo el mundo, y cuáles sus consecuencias.
La base de la ideología fascista es la reivindicación de un pasado glorioso de la nación y la lucha contra los obstáculos que impiden su resurgir. El fascismo italiano y el nazismo alemán fueron sus máximos exponentes, y por eso son los que se analizan más de cerca; pero hubo muchos otros movimientos fascistas como es el caso de Falange Española y de las JONS en el Estado español, que no solo compartió ideas y prácticas con ellos, sino que consiguió el apoyo del fascismo internacional para acabar con la II República española y sumir a España en cuarenta años de una dictadura sanguinaria.
Lena Berggren en el epílogo del libro afirma: «Siempre he considerado la historia una herramienta para entender el presente». Nuestro presente no está solo marcado por la pandemia del Covid-19, sino por el resurgir de las ideas fascistas que marcaron la realidad de la primera mitad del siglo XX. Conocer la historia para entender el presente y para evitar que se repita el pasado, una necesidad que se hace más evidente cuando vemos cómo los nuevos populismos y nacionalismos excluyentes esconden sus ideas tras una imagen y un discurso más moderno, que no pueden ocultar una ideología xenófoba, supremacista, homófoba, autoritaria y contraria a los derechos de la mujer, y sus conexiones con los grupos neofascistas.
¿Qué es en realidad el fascismo? se dirige sobre todo a las jóvenes generaciones, que afortunadamente no vivieron la dictadura en la propia piel, pero también a todas aquellas personas que crean necesario hacer un repaso histórico de una época que no queremos que se vuelva a repetir.