
Entrevista a la ilustradora Nanen García-Contreras
2 junio, 2021
En Takatuka acabamos de publicar La verdad verdadera un álbum escrito e ilustrado por Nanen García-Contreras. Esta ilustradora nacida en Guadix (Granada) estudió Bellas Artes, especialidad de pintura y seguidamente cursó Diseño y Grabado en Sevilla. Actualmente es profesora de artes plásticas en secundaria y compagina este trabajo con sus inquietudes artísticas como la ilustración, la animación, la escultura o el grabado.
Hoy hemos querido entrevistarla y que nos cuente más cosas sobre el nuevo título y también sobre su día a día. Esperemos que nos cuente toda la verdad.
Cuando eras pequeña ¿cómo eran tus dibujos? ¿Y tus mentirijillas?
En mis dibujos, como en los de la mayoría, siempre pasaban cosas, los que aún conservo son coloridos y llenos de personajes. Me pasaba las horas dibujando y disfrutando de esos mundos que yo creaba. Mis mentirijillas eran eso, mentirijillas, quizá alguna vez se colaba una cochina o podrida… Las gordas aparecieron ya de mayor.
Compaginas la ilustración con tu trabajo de profesora de artes plásticas de secundaria. ¿Cómo es tu día a día?
Aunque a veces es difícil porque la adolescencia es una edad compleja, planteo temas y actividades que nos nutran tanto a ellos como a mí, y habitualmente disfruto mis clases y aprendo mucho de ellos, de su libertad y espontaneidad. El arte puede ayudarles a su desarrollo personal y a relacionarse mejor con el mundo y eso es lo que intento, y en ese intento también yo crezco.
Dices que crear es para ti una necesidad vital, porque si no te apagas. ¿En qué momentos te sientes más inspirada y con qué?
Me siento más inspirada cuando consigo dejarme llevar por la creación, cuando consigo jugar, como cuando dibujan los niños. Me ayuda cambiar de registro: cerámica, stop motion, estampación, fotografía, etc. También el contacto con la naturaleza y el silencio. Pero la verdad es que casi siempre creo entre el sonido de la lavadora y el de la olla exprés.
Este libro fue finalista en el Concurso Internacional de Álbum Ilustrado de la Biblioteca Insular de Gran Canaria en 2019. ¿Qué otros reconocimientos has obtenido hasta el momento?
He sido seleccionada para The Sharjah Childrens Reading Festival en 2015, 2016, 2017, 2018 y en 2021, en los Emiratos Árabes y, para el Nami concours, en 2017. También en 2017 fui seleccionada para el Catálogo Iberoamericano de Ilustración.
En 2015 y en 2019 fui seleccionada en Vilustrado, Encuentro Internacional de ilustración de Valladolid. Recibí el Premio del Concurso Internacional Vilustrado El comienzo y el tercer premio en el 8º Encuentro Internacional de Ilustración Sao Joao da Madeira en Portugal El infinito, en 2015.
En 2016 gané el concurso Cuentos por la igualdad del ayuntamiento de Dos Hermanas con la obra ¿Has sido tú?. En 2017 recibí el Premio Migraciones Andalucía en la modalidad artística con el cuento La niña que quería escapar de su página. Quedé finalista del Premio Lazarillo en la modalidad de álbum ilustrado en 2017 con la obra Ni el viento, ni el fuego, ni el ruido. También quedé finalista en el concurso internacional de álbum ilustrado Biblioteca Insular Cabildo de Gran Canaria en 2018 con Mi selva.
La protagonista de La verdad verdadera podría ser cualquier niño. ¿Resulta fácil descubrir las mentirijillas de los peques? ¿Qué les delata o qué herramientas tenemos los adultos para destaparlas?
Hay mentiras que tienen que ver con su mundo de fantasía y otras que sí que tienen una intención. Yo creo que la labor del adulto no es destaparlas sino crear un clima de confianza y sinceridad y dar ejemplo. Pero lo cierto es que, según los expertos, mentir es una de las características más salientes de nuestra especie. Aunque haya humanos que perjuren que nunca mienten, todos mentimos, son conductas que forman parte de las relaciones humanas.
¿Podríamos decir que cuanta más imaginación tiene el niño o niña más creativas son sus mentirijillas?
Totalmente de acuerdo.
Los adultos también solemos recurrir a las mentirijillas para evitar ciertos temas con los peques, pero estos cada vez tienen más información. ¿Crees que esto nos obliga a ser más sinceros con ellos?
Como te comentaba, creo que es muy importante ser coherentes y evitar esas mentirijillas, que puedan confiar en nosotros y exponernos sus dudas porque la información a la que tienen acceso en según que temas es muy confusa.
¿Cuál es la mentirijilla más divertida que te ha dicho uno de tus alumnos? ¿Y cuál es una de las que más se repite?
La más divertida fue la de que su perro se había comido el trabajo; nunca pensé que alguien me la fuese a decir algún día, quizá era verdad. La que se repite casi a diario es «lo tenía hecho pero es que lo olvidé en casa».