Entrevista a Lucia Zamolo, autora de El rojo es bello

22 noviembre, 2019

Empiezas El rojo es bello narrando cómo se vive una primera experiencia con la menstruación. ¿Estás hablando tu propia vivencia? ¿Cómo recuerdas el día en qué te vino la regla? ¿Cómo lo viviste entonces y cómo lo vives ahora?

Sí, así fue como viví mi primera regla, tal como la describo en el libro ♥. En algún momento me acostumbré a la sangre, los cambios de humor y los retortijones de barriga, lo cual no quiere decir que no me molestara. Desde que acabé mi trabajo de fin de grado y la investigación correspondiente intento vivirla cada vez como una circunstancia positiva, como un regalo.

¿Qué crees que tu libro puede aportar a una chica que está esperando su primera regla o que ya ha tenido sus primeras experiencias con la regla?

Pienso que, aunque mi libro empieza de manera negativa, lo importante es que intenta promover una visión positiva y da ánimos para no esconder la menstruación y todo lo relacionado con ella. Espero que una relación más distendida sirva para que se vayan reduciendo la vergüenza y los dolores.

En el libro haces un breve repaso de cuál ha sido la consideración social de la regla en el pasado y cómo sigue siendo hoy en día, de las diferentes explicaciones que se dieron y, en parte, se siguen dando sobre la cuestión de la regla. ¿Cuál te ha parecido la explicación más absurda? ¿Por qué la menstruación sigue siendo un tema tabú?

Me resulta difícil de decidir cuál teoría o costumbre es la más absurda. Durante las investigaciones para el trabajo de fin de grado averigüé que había un pueblo en África que creía que los hombres se transforman en árboles parlantes si los mira una mujer menstruante. Son todas teorías absurdas. Algo positivo: los germanos pensaban que las mujeres menstruantes eran intermediarias entre los dioses y las personas. Y respecto a por qué la menstruación sigue siendo un tabú hoy en día, esa es justo la pregunta que plantea mi libro, pues según mi opinión, ¡no hay ningún motivo para ello!

¿Por qué una mujer cuando tiene la regla se siente desprotegida e insegura? ¿Es algo natural o algo que les han inculcado a las mujeres?

Pienso que es un sentimiento y un comportamiento que se ha inculcado a las mujeres. Cuando la publicidad que nos rodea diariamente expone una mancha como algo vergonzante, entonces esta visión se va interiorizando. Teniendo en cuenta las connotaciones negativas que se vienen arrastrando desde hace siglos, una evolución así no puede resultar sorprendente, ¿verdad?

La información que los hombres tienen de la menstruación seguro que no es mejor que la que tienen las propias mujeres. ¿Crees que se debería incluir el tema de la menstruación en la educación sexual tanto de los chicos como de las chicas?

¡Me parece una necesidad, sin duda alguna! Hay muchas posibilidades y caminos para que un tema complejo como este pueda presentarse de una manera interesante, divertida y, sobre todo, sin necesidad de avergonzarse.

Se nos ha hecho creer que es solo cosa de mujeres. ¿Pero crees que se debería implicar a los hombres en algo tan cotidiano como es tener la regla cada mes?

Pienso que, como mínimo, deberían estar informados de lo que pasa en el cuerpo de la mujer. Se podrían evitar así muchos malentendidos y situaciones penosas.

¿Crees que las nuevas generaciones la vivirán de otra forma? ¿Si alguna vez tienes a una hija como te gustaría que lo viviera?

Espero que el tabú sobre la menstruación irá desapareciendo y que mis hijos o hijas tendrán una actitud positiva al respecto; y que los dolores irán desapareciendo.

La eliminación o aplicación de un IVA mínimo para los productos de higiene femenina es una de las conquistas inmediatas que se plantean desde el movimiento feminista en relación con la menstruación. ¿Pero qué otras medidas se deberían tomar a nivel social y político para que la regla fuera normalizada socialmente?

En Alemania se acaba de aprobar en el Parlamento Federal la reducción del IVA sobre los tampones. Que una cosa así no haya pasado hasta el año 2019 resulta increíble, ¡pero algo es algo! Me puedo imaginar que si se garantizara el acceso gratuito de artículos de higiene femenina en instituciones como escuelas o universidades o en los puestos de trabajo, eso podría ser un paso importante en la normalización de la menstruación. ¡Pero tampoco estaría mal empezar por tener lavabos limpios con cubos adecuados y papel de váter! Me alegro siempre que descubro artículos de higiene diseñados con cuidado y afecto, ¡enseguida te entran más ganas de usarlos!

En tu libro planteas una cuestión muy interesante: «¿cómo hubieran sido las cosas si los hombres tuvieran la regla?» ¿Cómo crees tú que hubieran sido?

Puesto que son los hombres los que, a lo largo de la historia, le han atribuido propiedades negativas a la menstruación y las han utilizado como criterio de exclusión, pienso yo que todo habría sido al revés: sería un don especial con propiedades especialmente positivas. Vivimos en un mundo marcado por el patriarcado, no hay duda.

¿Qué te llevó a hacer este libro? ¿Cuáles han sido tus fuentes? ¿Nos podrías recomendar alguna autora o lectura complementaria?

El libro es mi trabajo de fin de grado y estuve trabajando entre 2 y 3 meses, día y noche. El tema se me ocurrió observándome a mí y a mi círculo de amigos y amigas. En el piso compartido en el que vivía se empezó a hablar con mucha más frecuencia y de una manera más abierta, cuando se mudó a otro piso el único chico que vivía con nosotras y nos quedamos solo mujeres. Eso me hizo recapacitar y me dio rabia, porque me di cuenta de que yo tampoco me había expresado siempre con libertad sobre este tema. Quería cambiar esto y por eso empecé con el proyecto de libro. He leído mucho sobre el tema, y he hablado con muchas personas y observado mucho. Pienso que todas las personas de este planeta deberían leer el cómic de Liv Strömquist El origen del mundo.

El libro está planteado como una mezcla de diario, novela gráfica, libro informativo y libro de autoayuda, y todo escrito a mano. ¿Te resultó difícil encontrar ese tono entre informal, informativo y humorístico?

Ni mucho menos. La inspiración me vino de una manera intuitiva. Quería ofrecer un libro muy variado tanto por lo que se refiere al contenido como a lo visual. El tema se tenía que presentar de la manera más accesible posible, despertar la curiosidad y provocar la sonrisa, el asombro y el rechazo en las lectoras y los lectores. Es por eso que he intentado incluir un poco de todo lo que he encontrado en relación con el tema. Las páginas tenían que ser coloridas y cargadas de emoción, como lo es el tema para mí. Por eso también la letra manuscrita: son pensamientos, notas, historias que he ido reteniendo y que expongo de una manera muy personal.

El rojo es bello fue tu trabajo de fin de grado de Diseño en la Münster School of Design, y con él has ganado el premio de ilustración Serafina. Sin embargo, no te fue fácil encontrar una editorial dispuesta a editar el libro en Alemania. ¿Por qué?

Sí, eso me lo pregunto yo también. En todos los sitios que presenté el proyecto se me dijo: ¡GUAU, qué libro tan interesante, importante y, además, divertido! Pero por desgracia no acaba de encajar en estos momentos por este o aquel motivo en nuestro programa editorial. ¡Así que más fantástico resulta que al final haya recibido tanta atención e incluso un premio! Estoy muy agradecida de que al final haya ido todo bien con la publicación, no porque sea un libro hecho por mí, sino porque durante todo el tiempo que he dedicado a este trabajo ¡el tema se fue convirtiendo en un asunto de vital importancia para mí!

¿A cuántos idiomas se ha traducido el libro ya?

Ya he hecho la transcripción manuscrita de las traducciones al castellano, catalán y holandés. También se han vendido derechos a Italia, Bulgaria, República Checa, Eslovaquia, China y Corea. ¡NUNCA hubiera pensado en una cosa así!

¿En qué proyectos estás trabajando ahora o piensas trabajar próximamente?

Estoy trabajando en varias direcciones, y todavía no sé cuál de estas ideas se acabará convirtiendo en un libro.